Mano a mano
En el año 2013 mi amigo Miguel Cuerdo me propueso contar cuentos con un/a artista sorda/o. Dije que sí. Y comenzó una aventura que aún vivo, porque aunque Mano a mano dejó de hacerse después de un recorrido precioso: el Festival Una mirada diferente del Centro Dramático Nacional, FETÉN, Teatralia, y una versión adaptada al Museo del Prado; yo he seguido interesada en la belleza de la inclusión y en la exploración de la accasibilidad como práctica estética. Mano a mano fue un comienzo, y a mí me encantan los comienzos.